Después de 16 largas horas de viaje y con el trasero mas aplastado que una hogaza de pan árabe estoy de regreso en San Güicho.
Este fin de semana me largué a Chihuahua, como ya lo había comentado con anterioridad, para traer de regreso a mi amada y conocer a sus Papás (creepy).
Iba yo esperando desde un simple "buenas tardes joven" y no ver nada mas que la espalda de mis interlocutores, hasta un "sáquese a la ch...." mientras era encañonado con una escopeta calibre 12.
Pero sorpresas te da la vida, todo mundo me recibió con amabilidad y calidez, me topé con que los papás de mi amada son finísimas personas que atentamente se presentaron y hasta me invitaron a comer.
Cayendo la noche, nos fuimos de farra con una de mis cuñadas, chica agradabilísima por cierto, y algunos amigos a un sitio llamado "el San Juan" donde nos pusimos hasta las manitas (jejeje), para después terminar en las "famosas" tortas aguacateras (muy buenas y llenadoras)
Balance: Un nuevo lugar que conozco, nuevas relaciones con buena gente que sabe recibirte con los brazos abiertos :) y lo mejor de todo, un largo viaje contemplando a mi amada postrada en mis piernas mientras le susurraba al oído cuanto la amo.
Beso al bebé.
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